BMW anunció  la producción de un nuevo vehículo con cinco tecnologías de propulsión diferentes. El nuevo BMW X5 será el primer modelo en ofrecer a los clientes la opción de elegir entre tecnología eléctrica de batería, híbrida enchufable, de gasolina, diésel (fuera de EE. UU.) y de pila de combustible de hidrógeno. Además, la iniciativa HyMoS (Movilidad de Hidrógeno a Escala) está diseñada para promover el desarrollo de ecosistemas de hidrógeno y estaciones de servicio en áreas metropolitanas y tiene como objetivo una implementación piloto inicial en Alemania.

«Con el lanzamiento del nuevo BMW X5, con cinco variantes de motor disponibles, demostramos una vez más nuestro liderazgo como pioneros tecnológicos», declaró Joachim Post, miembro del Consejo de Administración de BMW AG, Desarrollo, en un evento de BMW en Nueva York. «El hidrógeno desempeña un papel esencial en la descarbonización global, por lo que nos comprometemos a impulsar esta tecnología».

Un enfoque tecnológico abierto es un factor estratégico de éxito.

La diversidad de productos sigue siendo un factor clave para el éxito de BMW. Una amplia gama de sistemas de propulsión —que abarca motores de combustión interna, híbridos enchufables, sistemas de propulsión eléctrica y, a partir del nuevo BMW iX5 Hydrogen en 2028, la tecnología de pilas de combustible de hidrógeno— sienta las bases para satisfacer con éxito las diversas demandas y necesidades de los clientes de todo el mundo, tanto ahora como en el futuro.

Las estructuras de fabricación flexibles y la alta experiencia en integración permiten implementar eficientemente este conjunto de tecnologías de propulsión en la nueva gama BMW X5, tanto en términos de desarrollo, compras como de producción. Esto significa que la gama de modelos BMW incluirá dos tipos de propulsión eléctrica (eléctrica de batería y de pila de combustible de hidrógeno) a partir de 2028, lo que subraya la rigurosa aplicación del enfoque tecnológico abierto de la marca.

El nuevo BMW iX5 Hydrogen.

Tras el éxito de las pruebas de la flota piloto en todo el mundo, el nuevo BMW iX5 Hydrogen llegará al mercado como el primer modelo de la marca propulsado por hidrógeno producido en serie. «El nuevo BMW iX5 Hydrogen será un auténtico BMW: pionero en su categoría y con el placer de conducción característico de BMW», afirma Michael Rath, vicepresidente de Vehículos de Hidrógeno del Grupo BMW.

La tecnología de propulsión se basa en el sistema de pila de combustible de tercera generación que BMW está desarrollando en colaboración con Toyota Motor Corporation. Este avance tecnológico allana el camino para un sistema con un diseño más compacto, que también es más potente y eficiente, aumentando así la autonomía y la potencia, a la vez que reduce el consumo de energía.

Beneficios de la tecnología impulsada por hidrógeno.

El hidrógeno se reconoce como una fuente de energía prometedora para el futuro de la descarbonización global. Actúa como un medio de almacenamiento eficaz para las energías renovables, contribuyendo al equilibrio entre la oferta y la demanda y permitiendo una integración más estable y fiable de las energías renovables en la red eléctrica. El hidrógeno es la pieza clave para completar el rompecabezas de la movilidad eléctrica, donde
los vehículos eléctricos de batería no son la solución óptima.

Iniciativa HyMoS: alianza para fortalecer la infraestructura del hidrógeno.

Además de desarrollar el nuevo BMW iX5 Hydrogen, BMW también participa activamente en la expansión de la red de repostaje de hidrógeno. La iniciativa HyMoS (Movilidad de Hidrógeno a Escala) se creó para impulsar los ecosistemas de hidrógeno para la movilidad, en colaboración con socios industriales e institucionales. El objetivo de esta iniciativa es aumentar la viabilidad económica de los ecosistemas de movilidad de hidrógeno agrupando la demanda de todo tipo de vehículos, incluidos camiones, autobuses y turismos. Esto ayudará a optimizar la distribución y el uso de las estaciones de hidrógeno. La iniciativa apoya los proyectos de ecosistemas de hidrógeno existentes para que alcancen su máximo potencial, compartiendo experiencias entre proyectos y brindando apoyo sobre el terreno a sus socios industriales. Se inició una fase piloto con el apoyo de los ecosistemas existentes en Alemania y Francia para recopilar experiencias que permitan su implementación en otras áreas metropolitanas y una posible expansión posterior a otros países.